Mitos y leyendas urbanas sobre los seguros de automóvil

Cualquier persona que tenga un vehículo sabe que no puede circular sin el seguro obligatorio y que dispone de muchas opciones distintas para cubrir todas sus necesidades. Pero, en una época en la que cualquier rumor se difunde con facilidad, lo que quizá no sepa es que ni las mujeres pagan menos por su seguro ni el color del vehículo influye en el precio. Te aclaramos estos y otros mitos sobre seguros y coches para no te dejes engañar.

Las mujeres pagan menos en el seguro

Como te decíamos… no, no es cierto. Lo fue hasta diciembre de 2012 y estaba fundamentado en una realidad estadística, y es que las mujeres sufren, de media, menos siniestros que los hombres. Pero en esa fecha, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea prohibió esta práctica, por entender que suponía una medida discriminatoria .

Es mejor siempre un seguro a todo riesgo

Sería difícil que una aseveración tan tajante fuera cierta. Lo cierto es que, si tienes un vehículo nuevo, es decir, de menos de 5 años, es aconsejable tener un seguro que cubra el precio del coche en caso de siniestro, tal y como te contábamos en este mismo blog hace un tiempo . Pero los automóviles se deprecian considerablemente y, pasado ese tiempo, puede ser más conveniente escoger un modelo de seguro más barato, que se adapte mejor al coche que tienes y a tus necesidades.

El color del vehículo influye en el precio

No es verdad. Aunque esta leyenda urbana circula de boca en boca desde hace décadas. Sus defensores dicen que los vehículos con colores fuertes, como el rojo o el amarillo, pagan más por sus pólizas de seguro porque están relacionados con un mayor número de siniestros. También hay quien dice lo contrario, que vehículos con colores chillones, como el propio amarillo, son los que estadísticamente menos accidentes sufren, porque son más visibles con niebla, por ejemplo, y que, por eso, sus seguros son más baratos. Ambas afirmaciones, además de contradictorias, son falsas: las compañías no tienen en cuenta el color del vehículo para encarecer o abaratar sus pólizas.

La vigencia del seguro es de un año y un mes

Otra falsa creencia muy extendida es que la validez de un seguro se extiende por un mes de gracia más allá de los 12 que cubre obligatoriamente. Ese ‘mes de gracia’ es el que la compañía aseguradora deja a los clientes para que actualicen la póliza y efectúen su pago. Pero si no renováramos la póliza automáticamente y dejáramos pasar ese mes no tendríamos cobertura real sobre el vehículo y, en caso de accidente, la compañía podría negarse a pagar.

Con cada parte de accidente que das, aumenta el precio de la póliza

Este es un miedo que comparten muchos conductores y conductoras, cuando la realidad es que la gran mayoría de las compañías no aumentan tu prima a pagar por la póliza de seguros cuando das un parte. Hay muchas, cada vez más en la batalla por atraer clientes, que te ofrecen la posibilidad de dar tres partes de accidente al año sin que eso suponga un aumento del importe que has de pagar por tu seguro.

Y si no das partes de siniestros, la prima del seguro baja

Igual que el punto anterior, habría que matizarlo. Si hace tiempo que no has dado ningún parte, probablemente hayas alcanzado ya el tope de bonificaciones que te ofrecen las compañías de seguros por tu póliza, así que, no, no bajará más. En realidad, tampoco es una mala noticia: lo mejor que te puede pasar es que nunca tengas que dar parte alguno, eso hablará más que bien de tu fiabilidad al volante.

Cuidado con los extras del vehículo

Como hemos dicho al principio, conviene analizar bien las prestaciones de una póliza antes de contratarla. En la gran mayoría, por ejemplo, determinados extras del automóvil, como el GPS o las llantas de aleación, no se incluyen, a no ser que se hayan negociado y aparezcan expresamente mencionados en la póliza.

La póliza aumenta de precio si tienes hijos o hijas

Otro mito falso. Es cierto que las compañías, cuando formalizan la póliza, anotan muchos datos, entre ellos, si la persona tomadora del seguro tiene descendencia. Sin embargo, marcar que sí en la casilla no aumenta el precio del seguro. Otra cosa sería que el tomador o tomadora tuviera hijos o hijas menores de 25 con carnet de conducir que, ocasionalmente, fueran a utilizar el vehículo asegurado. En ese caso, no haría falta una nueva póliza, pero sí notificar esta situación a la compañía para que figuraran como conductores o conductoras ocasionales. Hay compañías que consideran un riesgo el hecho de que existan conductores ocasionales -sobre todo si son menores de 25 y/o llevan menos de 5 años en posesión del carnet-, y ofrecen descuentos a las pólizas en las que se declara expresamente que hay un único conductor.